La presentación, que se presentó una semana antes del vencimiento de la fianza, planteó la posibilidad de que el expresidente pueda enfrentar una crisis financiera a menos que un tribunal de apelaciones venga en su rescate. Trump ha pedido al tribunal de apelaciones que suspenda la sentencia de 454 millones de dólares que un juez de Nueva York le impuso el mes pasado, o acepte una fianza de sólo 100 millones de dólares.
El expresidente no ha podido obtener la fianza completa, dijeron sus abogados en el expediente judicial del lunes, a pesar de los “esfuerzos diligentes”. Esos esfuerzos incluyeron acercarse a unas 30 empresas y, sin embargo, dijeron, ha encontrado “dificultades insuperables”.
El juez del caso de fraude civil, Arthur F. Engoron, impuso la pena y otros castigos a Trump después de concluir que había inflado fraudulentamente su patrimonio neto para obtener préstamos favorables y otros beneficios. El caso, presentado por la fiscal general de Nueva York, Letitia James, ha planteado una grave amenaza financiera para Trump. Debe pagar una fianza de apelación que supere esa cantidad (posiblemente más de 500 millones de dólares para reflejar los intereses que deberá) para evitar que la Sra. James embargue sus activos el 25 de marzo.
