“La historia ha demostrado que casi todos los elementos de la sociedad pueden ser atraídos al tráfico de drogas”, dijo el director del puerto de CBP Ysleta, Arnoldo Gómez. “A lo largo de los años, los oficiales de CBP se han encontrado con adolescentes, personas de la tercera edad, familias y viajeros solteros contrabandeando drogas”.
El 6 de agosto, los oficiales de CBP asignados al cruce fronterizo de Ysleta se encontraron con dos personas que llegaban de México a través de los carriles para vehículos.
El agente las envió para una inspección secundaria del vehículo que incluyó una inspección canina y una revisión no intrusiva (rayos X). La búsqueda secundaria llevó a ubicar varios paquetes en todo el vehículo que contenían un total de 16.44 libras de fentanilo (7.45 kilos). La conductora, una menor de edad de 16 años de nacionalidad estadounidense, fue entregada a las autoridades estatales y locales para su enjuiciamiento. El pasajero, un ciudadano mexicano de 18 años, fue procesado para una expulsión acelerada y devuelto a México.
